lunes, 19 de agosto de 2019

IPSO FACTO




En el recuerdo sus rasgos permanecían intactos
Como intacto seguía siendo el amor que le profesaba
Aún después de tanto abandono.

Los dos compartían los rasgos de la madre,
De ojos grandes y pómulos prominentes,
Imágenes que volvían en sus sueños
Sin los estragos del paso del tiempo,
Y así lo hubiera seguido recordando siempre
Si una fotografía 
Del hermano ausente
No hubiese caído en sus manos por azar
Notificándole cuan cruel
Puede llegar a ser el paso de los años
Destiñendo ipso facto los recuerdos y el sentimiento.




GERIÁTRICO




Como un perfecto desconocido
Que no registra abolengos
Un día con falsedades
Ingresan a José en el albergue,
El ancho mundo de sus años mozos
Se reduce a un calabozo
Donde arrastra los recuerdos
En la agonía de su soledad.

Ni los músculos de acero
Ni la palabra recia
Sobreviven al abandono.

Irrumpe esperanzador el domingo
Y el anciano se engalana
Mientras las horas navegan
Entre nostalgias y sopores.

La mirada siempre extraviada del abuelo
Se clava en el picaporte
Su corazón maltrecho le anuncia
que hoy tampoco acudirá a la cita
La niña de sus amores.


NOSTALGIA




Se hicieron viejos los caminos polvorientos
Viejos los clásicos balcones
Viejos los pedruscos de la catedral
Viejos los troncos de las ceibas gigantescas
Y viejos los padres
El día que los hijos partieron
Con sueños de fortuna y grandeza.

Buscando sus ancestros
Retornan ya mayores
Acuden al llamado
De la sangre 
Una cita con el Fonce dijeron
Con los cerros sin escarbar
Con las calles empedradas
Y el calor de la barriada.

Regresaban
Al pueblo detenido en la memoria. 
Se abren paso
Entre un enjambre de potros de acero
Se ahogan con el ensordecedor chillido
De cientos de bocinas
Y los gritos exaltados
Del mísero rebusque,
Se escabullen de la alegre prostituta
Evaden sin éxito los abrazos metálicos
Del reputado ladrón de cuello blanco,
Reprueban los  sermones de un cura pederasta
Idolatrado por beatas.

El pueblo de sus nostalgias  
El que añoraron suspendido en el tiempo
Era presa de los mismos apremios
De la ciudad que atrás dejaban.